La ortodoncia es una especialidad de la Odontología que se encarga del estudio, prevención, diagnóstico y tratamiento de las anomalías de forma, posición, relación y función de las estructuras dento-maxilofaciales; siendo su ejercicio el arte de prevenir, diagnosticar y corregir sus posibles alteraciones y mantenerlas dentro de un estado óptimo de salud y armonía, mediante el uso y control de diferentes tipos de fuerzas.
El afán por corregir los dientes apretados, irregulares o salientes es muy antiguo, pues hay constancia de que ya en el siglo VIII a.C. se intentaba solucionar tales anomalías. Entre los hallazgos etnográficos del mundo griego y etrusco figuran aparatos ortodónticos de magnífico diseño.
Anteriormente se pensaba que los tratamientos de ortodoncia eran exclusivamente para los niños; sin embargo, hoy en día se sabe que pueden realizarse a cualquier edad consiguiendo excelentes resultados. También se cree equivocadamente que son tratamientos que tienen como objetivo mejorar solamente la estética, pero realmente los tratamientos de ortodoncia van más allá de eso, ya que consiguen mejorar la función, estética y desde luego la salud. También se corrigen problemas de fonética, ya que la mal posición dentaria también modifica la posición de la lengua lo que provoca la deficiente pronunciación de las palabras, también mejora algunos problemas respiratorios y de ronquido de algunos casos.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) establece que la maloclusión es el tercer problema de salud oral en prevalencia, ya que una incorrecta alineación dental predispone a secuelas prejudiciales como dificultades para mantener una correcta higiene oral, riesgo de generar caries y enfermedad periodontal, anomalías funcionales, problemas en la articulación temporomandibular y otros problemas psicosociales.